«Cuando se dibuja un rostro, cualquier rostro, es cómo si cayera una cortina tras otra, una máscara tras otra… hasta que queda una máscara final, una que ya no se puede sacar ni reducir»
Frederick Franck
En cada uno de nosotros hay una cierta habilidad para reconocer y diferenciar los rostros de las personas que nos rodean, aunque raramente nos detenemos a apreciar las pequeñas diferencias o los detalles que hacen de cada cara una expresión única.
En este curso pretendemos llegar a apreciar estas sutilezas. Y para lo cual la observación y la técnica son fundamentales.
Este es un curso abierto a cualquier persona, independientemente del nivel que tenga, puesto que para los alumnos sin la técnica adecuada, se entrelazarán ejercicios de dibujo que ayudarán a trabajar después con retratos al natural y a partir de fotografías.
Para alumnos más avanzados usaremos estos ejercicios para mejorar su capacidad, trabajaremos con diferentes medios expresivos y aprovecharemos nuestros conocimientos para profundizar en el discernimiento de las características de los rostros.