Los bodegones de cristales y metales están ejecutados con carbón prensado. El carbón prensado, al contrario del carboncillo da unos negros muy intensos, y es muy difícil de borrar completamente, inclusive con la goma.
La complejidad se ve acentuada en este trabajo, ya que el alumno parte de una superficie que él mismo encarbona por completo. Al revés que con el carboncillo, donde partimos del papel en blanco, para oscurecer poco a poco las sombras, en este trabajo el alumno parte de la absoluta oscuridad (el papel negro), para ir sacando las luces poco a poco con una goma maleable. La goma maleable es una goma blanda que no permite que el alumno llegue al blanco inmediatamente, sino poco a poco. Los trabajos al principio muestran los fantasmas, el aura de cada botella, de cada elemento, y a medida que se avanza en la oscuridad se va encontrando la esencia de cada elemento, los reflejos, las luces que hacen que el objeto aparezca, surja de la oscuridad.
Al final el alumno puede utilizar una goma normal para remarcar los brillos más importantes.